El queso Brie es un queso tradicional francés, elaborado con leche cruda de vaca y clasificado dentro de los quesos de pasta blanda. Recibe este nombre por la región geográfica francesa de la cual procede, la Brie, al este de París y es uno de los quesos más antiguos documentados del mundo.
Por su larga historia ha pasado a conocerse mundialmente como “el rey de los quesos”, ¿estás interesado en conocer más sobre el queso Brie? ¡Sigue leyendo!
Historia del queso Brie
Fue por los años 742-814, cuando el rey Carlos I el Grande (Carlomagno) mostró un gran interés por este tipo de queso francés. Cuenta la historia que por el año 774, cuando el rey iba camino a París, fue agasajado en Brie por los monjes. Estos monjes obsequiaron al rey con un queso Brie; desde ese momento, el rey quedó impresionado con este queso y solicitó un envío regular a palacio.
En poco tiempo el queso Brie ya era muy famoso entre la realeza, quienes lo solían utilizar como obsequio para agradar a las personas más influyentes de la época, como la condesa de Champagne, Enrique IV y Margarita de Valois o Blanca de Navarra.
En 1814, durante la celebración del congreso de Viena se coronó como “el rey de los quesos”, donde participaron treinta embajadores europeos con sus respectivos quesos para llevar a cabo el concurso.
Desde 1980 este queso tiene una denominación de origen protegida: Brie de Meaux
Características y consumo
El moho blanco que recubre el queso, y que le da ese toque tan característico, es el Penicilium candida, y se desarrolla durante el proceso de curación.
La pasta del queso Brie es untosa y flexible, lo que facilita su consumo en tostas. La corteza también es comestible y tiene un leve aroma a moho y champiñón fresco.
El queso Brie, se puede consumir tanto como aperitivo, como postre, solo o en combinación con otros quesos. Puedes acompañarlo de pan en tostas, introducirlo en sándwiches o fundirlo sobre carnes. A ti, ¿cómo te gusta tomarlo?